Mi ansiedad y yo:
haciendo las paces

Por: Mavis Suárez

¡Hola! 👋🏻  ¿Cómo estas?

Hoy te traigo un nuevo bocadillo «express»… Más bien una pequeña reflexión que he querido reflejar en mi Instagram @mavissuarezpsicologa, pero, quizás por el tipo de formato no puedo dejar todas las herramientas que quiero. Así que quiero  aprovechar este canal para compartir contigo algo un poco más detallado. 

La ansiedad es nuestra “aliada”, es una respuesta de supervivencia. Es un mecanismo universal, que hemos heredado de nuestros antepasados, es adaptativa, mejora el rendimiento, la capacidad de reacción, de respuesta, nos permite actuar ante riesgos o amenazas, afrontar situaciones, adaptarnos, etc.

Resumiendo, podemos decir que la ansiedad es normal, buena, funcional, todos los seres vivos la tenemos y no representa ningún problema para la salud.

Sin embargo, en algunos momentos este sistema “aliado” puede volverse en nuestra contra y perder su función de ayuda. Nos incapacita, dificulta nuestra vida, nos provoca malestar, sufrimiento, miedo, se vuelve un problema… ¿Cuándo pasa eso?

Nuestra mente es incapaz de distinguir la realidad de la imaginación, y cada vez que aparecen este tipo de pensamientos, nuestra mente lo identifica como si realmente estuviese pasando, produciéndose así la activación de nuestro organismo.

Déjame que te cuente que todas las personas tendemos a huir de aquello que nos asusta. El sentir miedo es desesperante. Parece que no hay salida, y únicamente aumenta el malestar. Evidentemente, siempre seguiremos sintiendo emociones como la tristeza, la rabia o la ansiedad. Eso quiere decir que estamos vivos. Sin embargo, es muy diferente vivir en un estado de constante depresión, ansiedad, ataques de pánico… que vivir en calma con momentos de malestar a lo largo de tu vida. Nadie nace con malestar, este va apareciendo a lo largo de la vida y va creciendo si no hacemos nada por deshacernos de él.  Es cierto que, para que este malestar constante desaparezca, tengo que hacer algo. No valdrá la paciencia ni el tiempo. Hay que ponerse manos a la obra.

Si sientes una ansiedad molesta, y sufres los síntomas desde hace años y has leído muchos libros de autoayuda sobre ansiedad, consejos, meditaciones… y al no sentir resultados piensas que no hay solución y no logras REGULARLA. Te dejo una herramienta para un alivio momentáneo yo le llamo “automonitoreo emocional”. vamos a identificarla, céntrate en tus síntomas físicos, cuales aparecen primero

  • Nerviosismo, agitación, tensión
  • Aumento del ritmo cardiaco (palpitaciones)
  • Respiración acelerada, hiperventilación
  • Sensación de peligro, de pérdida de control
  • Sudoración
  • Temblores
  • Sensación de debilidad, cansancio, agotamiento
  • Problemas de atención y concentración
  • Problemas para dormir
  • Problemas gastrointestinales
  • y Preocupación excesiva

Ya los tenemos identificados vamos anotar en qué situaciones o ante qué pensamientos aparecen, La ansiedad es la forma que tiene nuestro cuerpo de avisarnos de que “algo no va bien”, podemos preguntarnos ¿de qué me está avisando mi ansiedad?, ¿qué estoy pensando?, ¿qué estoy haciendo?, si me centro en intentar disminuir los síntomas físicos, más se intensificarán. Si tienes identificado que piensas, que haces, que situaciones te generan ansiedad será mucho más fácil avanzar. 

Eso si, toma en cuenta que este tipo de análisis personal puede ser un poco complicado, por eso te invito a buscar ayuda de un profesional que te acompañe en tu camino a la regulación emocional. 

Un abrazo terapeutico. 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio
× ¿Cómo puedo ayudarte?